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Durante el embarazo es muy frecuente la aparición de una serie de problemas bucales específicos o bien el avance de otros ya existentes, por todo esto es fundamental realizarse una revisión en el inicio del embarazo y otra al término del mismo.

Mediante una serie de medidas de prevención orales, como es el uso de flúor, una dieta equilibrada y un aumento de los hábitos de higiene, se mejora la salud oral de la embarazada, la cual también va a repercutir en un desarrollo correcto de los dientes del feto así como en la prevención de nacimientos prematuros o de bajo peso.
La mayoría de las alteraciones o enfermedades que aparecen durante el embarazo pueden y deben de ser tratadas, siempre que se pueda durante el segundo trimestre del embarazo.


Las principales patologías son:

  1. Caries: a pesar de la idea generalizada de que “cada embarazo cuesta un diente”, no hay evidencias clara de una mayor pérdida de calcio en los dientes, por lo que no hay razones para pensar que puedan aparecer mas caries que las debidas al abandono de la higiene oral o el aumento exagerado en el consumo de dulces.

  2. Toda lesión debe ser tratada antes de que se provoque una afectación pulpar, pues en las embarazadas la endodoncia no es recomendable al no poder hacerse radiografías y el tratamiento médico estar muy limitado.

  3. Gingivitis: consiste en la inflamación reversible de las encías. Debido a la disminución del cepillado (por fatiga), cambios en la dieta y cambios hormonales, la encía esta mucho mas sensible sobre todo desde el segundo a octavo mes de gestación, pudiendo aparecer gingivitis o en el caso de que ya existiese, provocándose su empeoramiento y evolución hacia una peridontitis (piorrea).

  4. Aparición de crecimientos de la encía (épulis) que pueden dificultar la masticación y ser dolorosos.

  5. Aparición de aftas (llagas) recurrentes.
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Se consigue mediante la eliminación total de los microorganismos y sus productos en los canales radiculares y el sellado hermético de los mismos para aislarlo del resto del organismo.

Actualmente se usa para su realización un material conocido como gutapercha, empleando un sistema de calentamiento de esta mediante un dispositivo para conseguir un sellado tridimensional eficaz y rápido de los conductos radiculares. Previamente han sido preparados mediante un instrumental rotatorio que les confiere una anatomía ideal para la obturación tridimensional.

¿Cuándo puede ser necesario hacer una endodoncia?

  • Dientes con caries extensas muy próximas al nervio.
  • Dientes que ha sufrido un traumatismo
  • Dientes que van a ser sometidos a determinados tratamientos protésicos tales como coronas o fundas
  • Dientes que han sufrido un cambio de coloración
  • Dientes con “Síndrome del Diente Fisurado”

Se ocupa de mantener la salud bucal del paciente infantil al adolescente mediante la prevención, mantenimiento y tratamiento de las piezas temporales (dientes de leche).

La importancia de los dientes temporales radica en:

  • Son importantes en la masticación.
  • Riesgos de dolor, inflamación de la cara si se deja que la caries avance.
  • Evitar infección que puede afectar los dientes permanentes que se están formando junto a sus raíces y que éstos presenten defectos.
  • Mantienen el espacio a los dientes permanentes que aparecerán en su lugar (los molares temporales se recambian entre los 6 y los 12 años). En caso de ser extraídos prematuramente, existe la posibilidad de tener que colocar mantenedores de espacio, aparatos que permiten que la dentición permanente consiga una ubicación correcta en la boca.

Es muy importante empezar con el control en el momento que empiezan a aparecer las primeras piezas en la boca, que suele ocurrir sobre los 6 meses.

Los tratamientos más frecuentes son:

  • Enseñanza de higiene dental y profilaxis
  • Control de la erupción y de sus posibles alteraciones
  • Prevención de la caries mediante el uso de flúor y selladores
  • Tratamiento de las caries en ambas denticiones
  • Mantenedores de espacio en casos de pérdida prematura de dientes temporales
  • Tratamiento pulpar: pulpotomía y pulpectomía en dientes de leche y endodoncia en dientes definitivos.
  • Retención prolongada de dientes definitivos
  • Traumatismos
  • Estudio de las anomalías dentarias

La belleza de la sonrisa.

Actualmente disponemos de diversos tratamientos para satisfacer todas las necesidades de nuestros pacientes:

  • Carillas de composites

Es una capa de composite especial muy estético que se coloca sobre la cara frontal del diente para poder resolver problemas de alteraciones en el color, malposiciones dentarias, alteraciones en la forma y tamaño de los dientes.

Tiene como ventaja que el diente prácticamente no se debe tocar, pero requieren un mantenimiento periódico.

  • Composites rosas

Corrigen pequeños defectos estéticos de la encía que ha sufrido retracción a nivel del cuello y papila de los dientes. Si la pérdida es muy grande se debe recurrir a técnicas de regeneración mucogingival.

  • Carillas de porcelana

Es una capa de porcelana de alta estética que se coloca en la cara frontal de los dientes para resolver los mismos problemas vistos en las carillas.

Tiene como ventaja que es mucho más resistente y duradero que las de composite, aunque si requieren de un pequeño tallado de la pieza para poder cementarlas.

  • Fundas sin metal

Zirconio – disilicato de litio entre otros materiales, han sustituido el empleo de aleaciones metálicas, todo mediante la toma de medidas de manera digital con escáneres intraorales y el diseño digital de las mismas.

Son porcelanas que confieren una alta estética y biocompatibilidad, provocando en las fundas una translucidez, dureza y naturalidad similar a los dientes, evitando problemas de alergia o márgenes oscuros si la encía se retrae.

- Blanqueamientos dentales.

  • Interno: se realiza en dientes con endodoncias y que han sufrido una alteración importante del color. Debe hacerse en clínica.
  • Externo: se hace en casa o en clínica. Consiste en la aplicación de un producto que penetra en los dientes sin dañar el esmalte y produce una reacción química que tiene como resultado el aclarado de estos. No siempre es eficaz un blanqueamiento, existen algunas contraindicaciones y es aconsejable antes hablar con un profesional.

Es la rama de la Odontología que estudia la prevención, diagnóstico y tratamiento de las enfermedades que afectan los tejidos que dan soporte a dientes o a los sustitutos implantados (implantes dentales) y que son la encía y hueso.

La enfermedad periodontal se divide en tres tipos:

  1. Gingivitis: sangrado e inflamación de la encía, sin dañar al hueso, es reversible y suele ser uno de los primeros síntomas.
  2. Periodontitis: se produce ya un daño irreversible en el hueso y si no se trata a tiempo puede ocasionar la pérdida de las piezas. Se conoce coloquialmente como “piorrea” y se detecta por la aparición de movilidad en las piezas.
  3. Periimplantitis: está afectada la encía y hueso que rodea a un implante.

El tratamiento se divide en tres fases:

  1. Higiénica: tartrectomía o raspado y alisado radicular para eliminar el sarro y mal aliento, enseñanza de higiene oral para controlar la placa y eliminación de factores predisponentes como el tabaco (produce una disminución del sangrado de la encía cuando está irritada), alcohol, diabetes, mala dieta.

Actualmente disponemos en la clínica de un aeropulidor de alta calidad (Airflow), especialmente diseñado para eliminar bacterias endurecidas y el sarro dental. Airflow puede acabar con manchas dentales superficiales. Limpia los dientes y encías con éxito, gracias a sus puntas específicas de una manera totalmente indolora. También lleva a cabo el pulido dental con total seguridad.

2. Quirúrgica: cirugía periodontal para una limpieza más profunda o eliminación de tejido en mal estado y cirugía regenerativa para cubrir defectos.

3. Mantenimiento: controles periódicos para evitar la reactivación de la enfermedad, puesto que es un proceso crónico.

Es una rama de la Odontología que se encarga de estudiar y corregir las malposiciones dentales, así como las alteraciones esqueléticas del maxilar y la mandíbula, guiar la erupción dentaria y el desarrollo de los maxilares para conseguir un perfecto equilibrio tanto funcional como estético.

La ortodoncia no tiene actualmente edad límite de tratamiento. La malposición se puede corregir a cualquier edad. A los niños se les aconseja llevarlos al ortodoncista antes de los seis años para poder detectar alteraciones dentales o esqueléticas importantes de manera precoz y poder corregirlos fácilmente

Existen 2 tipos de ortodoncia:

*Removible: pueden ser retirados por el paciente para su higiene oral y las comidas. Solucionan maloclusión en los pacientes generalmente con dentición temporal y permiten que la ortodoncia fija sea más sencilla o no sea necesaria. Nunca sustituye a la Ortodoncia fija.

*Fija: actualmente casi la totalidad de los casos se resuelve mediante el empleo de unas férulas transparentes casi invisibles (Ortodoncia Invisible) que se cambian de manera periódicas y van provocando el movimiento de los dientes. Todo el estudio y planificación se realiza mediante la toma de medidas digitales con los escáneres intraorales Itero/Cerec.

También existe la posibilidad de usar elementos adheridos a los dientes (bandas y brackets) a los que se ancla firmemente unos finos arcos de aleación metálica (níquel-titanio) para provocar el movimiento de los dientes. En muchas ocasiones los pacientes precisan de ambas técnicas para la resolución de su problema, estamos hablando entonces de una ortodoncia en dos fases, una temprana con removible y una segunda con fija cuando se ha producido el recambio dentario.

La Implantología es una rama de la Odontología que tiene como objetivo sustituir dientes perdidos mediante la colocación quirúrgica de un implante en el hueso maxilar o mandibular.

Un implante dental es una fijación de titanio puro que se coloca en el hueso maxilar o mandibular (previo estudio radiológico mediante un cbct/rx 3D) con el fin de sustituir a las raíces de las piezas dentales perdidas, lo cual nos permite reemplazar la pieza natural por una pieza artificial de mejor funcionalidad e igual o mejor estética, sin tener que dañar los dientes adyacentes al hueco o bien reponer una parte o toda la arcada si existe ausencia de todas las piezas.

Existen muy pocas contraindicaciones absolutas, entre las que podemos destacar enfermedades graves que influyan en el metabolismo del hueso y la sangre, infecciones específicas, tumores malignos que afecten al hueso o radioterapia en grandes dosis de forma reciente.

Es importante decir que los implantes no provocan rechazo en el organismo, tan solo puede ocurrir que fracase la osteointegración (se estima normal un nivel de fracasos del 2% de los implantes colocados). Aquí entra en juego la pericia del cirujano, la dificultad del caso a tratar, y determinados hábitos del paciente que pueden empeorar el pronóstico (tabaco, alcohol, mala higiene). Cuando un implante fracasa puede volver a colocarse otro para sustituirlo.

La cirugía para la colocación de los implantes en la mayoría de los casos se lleva a cabo en el gabinete dental con anestesia local, siendo en algunos casos aconsejable el uso de sedación oral o intravenosa (colocación de un número elevado de implantes en la misma cita).

Actualmente existen técnicas muy avanzadas y específicas para la colocación de implantes, dentro de las cuales podemos destacar:

· Cirugía guiada por ordenador que nos permite la colocación tridimensional más correcta de los implantes y su correspondiente prótesis.

. Implantes transmucosos, se trata de colocar los implantes dentro del hueso con una cirugía mínimamente invasiva sin abrir la encía, es decir, sin realizar incisión ni sutura. Es una técnica muy rápida y sin dolor.

· Colocación de implantes y dientes provisionales en un mismo día, solo posible en casos muy concretos y favorables

Esto se consigue mediante una serie de actuaciones:

• Detención y control de la placa bacteriana.

• Enseñanza de técnicas de cepillado e higiene oral.

• Control de la dieta, en especial la ingesta de hidratos de carbono.

• Test de susceptibilidad a la caries.

• Tartrectomía.

• Aplicación de flúor tópico en ambas arcadas o uso de colutorios.

• Inactivación de caries.

• Remineralización de surcos profundos, de manchas blancas y otras lúcidas.

• Aplicación de sellantes de puntos y fisuras en las piezas definitivas.